Masara Traore es una artista de Burkina Faso residente en Barcelona desde hace más de 20 años que ha actuado con múltiples grupos a lo largo de este tiempo como bailarina.
Cantante de gran personalidad y talento, Bailarina impresionante que incita a todo el mundo a seguirla con su enorme encanto.
Compositora de todas las canciones del grupo, tiene todos los ingredientes para convertirse en toda una estrella de la música africana actual.
Y si todo ello lo amenizamos con el magnífico grupo de músicos que la arropa, rodea y apoya, el resultado son conciertos de los que cada vez más gente está hablando y esperando en la ciudad condal.
Adama es de Mali y es quien marca la base de nuestro imparable y trepidante ritmo con su Jeli Goni. En una palabra, Adama es el corazón del grupo.
Adama tiene una amplia experiencia de trabajo con muchos grupos de Mali desde la edad de 18 años.
Ha colaborado con grupos como Nene Soumano, Djalou Damba, Fanta Sourougou, Babani Kone, Mama Draba o Paye Camara. Su especialidad es la música mandengue y bamaná.
Drissa es un extraordinario músico de Burkina Faso.
Es un experto tocando diferentes tipos de instrumento tales como: Balafon, Kora o Goni.
La música es su manera de respirar y su música fluye de forma completamente natural de manera siempre sorprendente.
Es miembro de una familia de grandes músicos.
Omar es un baterista senegalés con una enorme experiencia.
Ha tocado con grandes músicos de todo género como reggae, mandengue, hip-hop y más.
A la batería tiene una sorprendente velocidad que hábilmente nos estimula a todos con un ritmo vibrante y de color excepcional.
Pero lo que es verdaderamente sorprendente en él es su gran capacidad de improvisación, lo que permite que nuestra música derive en formas inusitadas y distintas en cada concierto.
Delario Tapé (Dede) es un percusionista de Costa de Marfil con gran experiencia participando en múltiples conciertos con distintos grupos.
También ha estado estudiando en el Taller de Músics de Barcelona.
Su ritmo trepidante no deja a nadie indiferente y provoca que todo el público baile frenéticamente en los conciertos de Masara.
